Víctor Monje es un volante central, quien tiene el récord de 162 partidos profesionales jugando por Provincial Osorno en primera división. Nació en Osorno, el 27 de mayo de 1972. Se integró a las series menores con 14 años, debutando contra Universidad de Chile en la temporada 1989, en la que el club laico estuvo en segunda división. Ese día el elenco osornino venció 2 a 1, con dos tantos del delantero argentino Raúl Horacio Chaparro. El equipo era dirigido por Guillermo Yávar, quien dispuso el ingreso de Monje a los 63 minutos en reemplazo de Adolfo Baeza. La revista Minuto 90 tituló la crónica del encuentro como: “Osorno más claro y contundente”.
Fotografía de Víctor Monje en Provincial Osorno de 1995 (foto: http://todostoros.blogspot.com/).
En Provincial Osorno jugó entre 1989 y 1998, logrando los ascensos a primera división en 1990 y 1992, bajo la dirección técnica de Guillermo Yávar y Jorge Garcés, respectivamente. Luego pasó a Unión Española, donde jugó entre 1999 y el 2002, siendo campeón con los hispanos en 1999 en la primera B, bajo la dirección técnica de Juvenal Olmos. Se retiró a los 30 años y actualmente juega en Stadio Italiano en la Liga Interestadios, en la liga La Reina en el equipo Jaguares y en la liga de ex profesionales en Universidad Católica, invitado por su ex compañero y amigo, Leonel Barrientos. En Stadio no se pierde partido, salvo cuando está muy lesionado. Siempre disponible, es partícipe de las series senior, super senior y dorada.
Víctor Monje disputando el balón ante Unión Española en 1993 (foto: Facebook Club Deportivo Deportes Provincial Osorno).
‘Vitoco’ Monje es un técnico dentro de la cancha. Es dueño de un gran temperamento y liderazgo. Muy difícil que la ganen un mano a mano. Grita y ordena la mayor parte del tiempo, sobre todo para asignar las marcas, achicar la cancha y dejar a los defensas mano a mano. Su táctica de juego preferida es con mucha presión cuando no se tiene la pelota y rotarla cuando está en poder de su equipo.
Destacado en una edición de la revista Don Balón del año 1995, lo definían como un todocampista: “Se esmera tanto en el quite como en la creación. Y tiene el físico necesario para hacerlo, por supuesto. Tales características los convierten en una de las piezas claves del medio sector osornino, aportando en la contención y la salida. Aunque en esta última función hay veces que se equivoca más de la cuenta”. En sus inicios, la revista Triunfo destacaba luego de ascender en 1992: “Ojo con Víctor Monje. Con 20 años es un todocampista. Dicen que es un émulo de Hugo Rubio”. Claramente la comparación tuvo poco respaldo y Víctor evolucionó hacia un juego bien distinto al del Pájaro Rubio.
Plantel de Provincial Osorno 1992: (Arriba) Jaime Bahamondes, Cristian Lopez, Ricardo Toro, Eduardo Fournier, Dino Olivera, Jose M. Muñoz. (Abajo) Víctor Monje, Cesar Muena, Jaime Muñoz, Edgardo Garces y Waldir Pereira (foto: http://mundotaurino-crag409.blogspot.com/2011/08/blog-post_84.html).
No hizo muchos goles en su carrera porque su misión era más bien defensiva, aunque cuando joven quería jugar de centrodelantero, como su ídolo Carlos Humberto Caszely. En los campeonatos oficiales de Primera División marcó siete tantos por Provincial Osorno. Su gol más recordado es uno que marca a Cobreloa en el 2 a 0 parcial, cuando en 1993 vencieron al equipo loíno por 4 a 2 en el Parque Schott. Tomó la pelota en terreno propio y partió dejando atrás rivales con potencia y velocidad, definiendo de zurda ante la salida del portero Berríos. El relato de Nestor Isella señala: “Es un golazo en toda su dimensión. Magistral la jugada y el finiquito de Víctor Monje”.
El golazo de Víctor Monje en el encuentro de Provincial Osorno y Cobreloa
Otro golazo del osornino se produjo jugando por Stadio Italiano frente a Estadio Croata, donde el mediocampista saca un tiro preciso también con su pierna menos hábil que se clava en un ángulo de la portería rival.
El mediocampista marcando otro golazo ante Estadio Israelita.
Del anecdotario casi infinito que tiene la vida de jugador profesional, hay una que fue famosa, pero en la que no se ha reconocido el rol de Monje. En el recordado ‘Candongazo’, protagonizado por Juan ‘Candonga’ Carreño en un encuentro entre Provincial Osorno y Huachipato, el ariete golpea a quien se le pone en su camino. Carreño reveló ese día virtudes boxeriles que tenía escondidas, pero que aparecieron esa tarde del 27 de septiembre de 1998. Todo partió de los típicos forcejeos y manotazos en la barrera, donde ‘Candonga’ tiró los primeros puñetes y fue expulsado. En su retiro de la cancha golpeó al arquero Hernán Caputto y a un ayudante técnico, los que cayeron al suelo producto de la potencia de los golpes. Parte de la ira del ariete se debe atribuir a una ligera patada que Monje le pegó a Carreño, la que este respondió con un golpe al primero que pilló al darse vuelta. No era ‘Vitoco’, quien había retrocedido estratégicamente y fue unos de los pocos que se salvó de los certeros y potentes golpes de ‘Candonga’.
Le encanta conversar de futbol y puede pasar horas intercambiando opiniones sobre un partido, recordando jugadas y marcando aciertos y errores. Víctor Monje respira fútbol. Es muy preocupado de sus compañeros y ha sabido enseñar a quienes ocupan el puesto de volante central. A veces la pasión lo traiciona un poco y termina expulsado, o con un compañero enojado con él por sus constantes gritos y reprimendas. Eso se acaba cuando suela el pitazo final. Monje baja las pulsaciones y deja de ser ese general de batalla vociferante y belicoso. Vuelve a ser esa especie de niño bueno del sur, vuelve a ser la arveja, como le dicen sus amigos.
Víctor Monje entrando al Parque Schott en encuentro de los históricos de 1990, 30 de septiembre de 2018 (Foto: Facebook Club Deportivo Deportes Provincial Osorno).
‘Vitoco’ es un tipo noble y generoso. Daniel Morón recuerda que, a su llegada al elenco sureño, era el propio Monje quien tapaba los hoyos del camarín para que sus compañeros, y especialmente un ídolo y campeón de América como Morón, no pasara frío. También, se destacan gestos poco habituales como la torta que le llevó a ‘Pipo’ Gorosito en un enfrentamiento con Universidad Católica en 1994, una artesanía que le obsequió al árbitro Iván Guerrero y su ofrecimiento al presidente del club Alejandro Kauak de un dinero para pagar los compromisos que el club tenía con sus compañeros. Su generosidad se evidencia también en reconocer los méritos de su hermano Eduardo quien batió el récord sudamericano en 1.500 metros con vallas.
Al ser entrevistado para esta nota, el jugador declara: “Algo de familia tiene esto de destacar en los deportes”. Al señalarle la importancia de los genes, ‘Vitoco’ responde: “Creo que todos tenemos nuestras habilidades, sólo hay que esforzarse, intentarlo y ver qué sucede”.
Ilustración de Víctor Monje vistiendo la camiseta de Provincial Osorno (Foto: http://todostoros.blogspot.com/).
Se siente orgulloso de lo que logró y ser el hombre récord de Provincial Osorno con partidos oficiales en Primera División, algo que se ve muy difícil de superar en el fútbol profesional actual y dada la realidad del equipo sureño. No obstante, la valoración humana para ‘Vitoco’ es más importante. Recuerda un premio a la ética deportiva que recibió y tambien la camiseta de regalo que Carlos Robles le obsequió en su último partido como árbitro. Los atesora tanto como sus logros deportivos. Aquellos que sigue sumando ahora en campeonatos menos exigentes, pero que ‘Vitoco’ enfrenta con la misma pasión, responsabilidad y seriedad que lo hizo en el fútbol profesional.
Fuentes:
- Revista Triunfo
- Revista Don Balón Chile
- http://www.solofutbol.cl/
- http://todostoros.blogspot.com/
