Una temporada de ensueño vivió el ‘Mati’ en 2006, alcanzando un vistoso bicampeonato nacional con Colo-Colo, la final de la Copa Sudamericana y un incipiente espacio en la Selección Chilena. Todo coronado con el cetro de Mejor de América.
La síntesis perfecta de Matías Fernández 2006: rabona al servicio del espectáculo y del equipo, como en la inolvidable jugada ante Huachipato. (Foto: EMOL)
Después de su ingrato debut oficial con la camiseta alba en 2003 (en la extinta fase nacional previa de la Copa Sudamericana) ante Deportes Ovalle, donde pese a llegar al gol lamentó la eliminación colocolina del certamen, Matías Ariel Fernández tuvo que esperar hasta la campaña 2004 para ver acción por campeonatos nacionales: en marzo de ese año, nuevamente una derrota colocolina fue el marco elegido para la primera aparición del jugador en torneos locales.
Luego de las discretas campañas de Colo-Colo en 2004 y 2005, con olvidables presentaciones como ante Universidad de Chile y Huachipato (0-4 y 2-4 respectivamente en el Apertura 2004) o verdaderos papelones en postemporadas (eliminaciones por goleadas en el global ante Cobreloa en el Clausura 2004 y Huachipato en el Apertura 2005 o la increíble derrota por penales ante Deportes La Serena en el Clausura 2005), la llegada de Claudio Borghi para 2006 confirmó a Matías Fernández como pieza clave en el tramado ofensivo del equipo, el que dispondría de Jorge Valdivia, Héctor Mancilla y Humberto Suazo como estandartes de una escuadra que saldría a buscar el gol como premisa.
Antes del arranque oficial, hubo que hacer espacio para la ilusión de avanzar en Copa Libertadores, tras la eliminación de la campaña anterior frente a Quilmes (el equipo había igualado 0-0 como visita y estuvo 2-0 arriba en la vuelta, hasta terminar cediendo un empate que lo eliminó por la regla del gol de visita), el rival designado para iniciar internacionalmente el año fueron las ‘Chivas’ de Guadalajara, que tras un irregular cierre de año 2005 parecía reencontrar viejas glorias con un expresivo 3 a 1 en Macul en el inicio del torneo continental.
Ese día, Matías Fernández señaló su primer gol en competencias internacionales al batir al meta Oswaldo Sánchez con un potente disparo desde fuera del área tras desairar a cuatro rivales en la elaboración de la jugada. El tanto fue el 1-2 parcial que Omar Bravo estructuraría minutos más tarde en un claro resultado, que en México fue refrendado por los tapatíos con resultado de 5 a 3, partido en el cual brilló ‘Chupete’ Suazo, quien consiguió un hat-trick que eclipsó a sus compañeros que vieron alejarse una vez más la opción de avanzar en la Libertadores.
SE INICIA EL TORNEO DE APERTURA
Ya enfocados en los torneos nacionales como exclusivo objetivo, los albos pretendían dejar atrás seis campeonatos sin alzar el trofeo, la máxima sequía en la historia de la institución, a la altura del período 1964 a 1969 o 1973 a 1978, cuando también estuvieron seis campañas sin gritar campeón, aunque posteriormente, se estableció el período 2010 a 2013 como el más amplio sin títulos nacionales para Colo-Colo, con siete torneos lejos de la consagración.
El inicio del derrotero colocolino en el torneo de Apertura 2006 fue esperanzador: en Rancagua, el equipo cosechó una clara victoria de 3 a 1 ante O’Higgins, presentando rápidamente argumentos ofensivos que alzaban la voz ante lo que sería ese equipo, con Suazo y el purranquino Mancilla en estado de gracia, iniciando el camino del gol. ¿Y Fernández? Lejos de la trascendencia.
Pero no todo sería camino de rosas en el amanecer del campeonato: una clara derrota 0 a 2 en Macul ante Huachipato (consumada en el primer tiempo) y un entretenido empate 3 a 3 en La Serena mostraban a un equipo un tanto desequilibrado en sus líneas, al que había que aplicar orden en el mediocampo para aprovechar la riqueza ofensiva que disponía, labor que sería cumplida a cabalidad por Rodrigo Meléndez, quien recién debutó en la quinta fecha.
Volviendo a Matías, el protagonista principal de esta historia, hizo su estreno en las redes una fecha antes del debut de ‘Kalule’, con un derechazo ante Everton que señaló el 3-1 parcial (5 a 3 el resultado final). Tras señalar su primer tanto del año mediante tiro libre ante Palestino en la fecha 6 Fernández se anotó con su primer doblete, ante Santiago Wanderers, con sendos disparos en área grande.
Tras un par de fechas alejado de los goles y las asistencias, ‘Mati’ Fernández encadenó tres buenas actuaciones ante Santiago Morning, Rangers y Universidad de Chile, convirtiendo tantos en cada uno de esos partidos, los que aportaban a la causa de un equipo que a esa altura del torneo era espectáculo en estado puro, con 36 goles señalados en 10 partidos. La propuesta de fútbol ofensivo le daba frutos a Claudio Borghi, quien encontraba en Fernández, Suazo, Valdivia y Mancilla a los cuatro jinetes de la cruzada que debía, inevitablemente, conducir al esperado título albo.
Las fechas 12 a la 15 de la fase regular supusieron un natural descenso en el rendimiento del equipo, el que cosechó inesperadas y consecutivas derrotas ante Universidad Católica y Unión Española y una angustiosa victoria frente a Cobreloa, en la que destacó el juvenil Rodrigo Tapia, quien señaló un gol ya avanzado el juego.
En esas jornadas, Fernández aportó con una asistencia en la caída ante la UC, en lo que fue su exclusiva contribución ofensiva; sin embargo, las sonrisas volvieron para el volante en la recta final de la fase regular, con el paso a playoffs más que asegurado anotando goles frente Coquimbo Unido, Deportes Puerto Montt y Deportes Antofagasta, que lo llevaron a diez anotaciones, quedando para la postemporada lo mejor del repertorio de ‘Matigol’.
Después de un cómodo inicio de la fase final del torneo, que se resolvió con un marcador global de 9 a 0 ante Unión Española (aportando apenas una asistencia en la llave), Fernández brilló en semifinales frente a Universidad de Concepción, destacando con dos goles en el partido de ida, jugado en Collao y asistiendo ¡de lateral! a Arturo Sanhueza en el cotejo de vuelta. En la final esperaba Universidad de Chile, cuadro que buscaba lavar heridas tras el subcampeonato del torneo de Clausura 2005.
El encuentro de ida de la gran final del Apertura mostró la mejor versión de un jugador que a esa altura era pieza indiscutida en el equipo. Tras el 1 a 0 para la ‘U’, conseguido por el colombiano Herly Alcázar, el mediocampista albo señaló dos tantos en el complemento, los cuales dejaron con la mejor opción de campeonar a Colo-Colo.
La vuelta, disputada el domingo 2 de julio de 2006, evidenció las dificultades que tuvo el ‘Cacique’ para cerrar llaves decisivas, permitiendo el gol de Luis Pedro Figueroa que llevó la definición a una recordada tanda de penales, en la que Fernández convirtió el primer lanzamiento colocolino e inició el camino que continuó Claudio Bravo con su recordada intervención frente a Mayer Candelo y finalizó Miguel Aceval, que puso fin a una inesperada sequía de títulos de la institución alba.
La celebración de Fernández en la final de ida del Apertura resume su gran actuación: dos goles y la sensación de acercar la estrella 24 a la estantería alba. Lo acompaña Luis Mena (Foto: EMOL)
Matías Fernández concluyó el primer semestre con 14 goles y 4 asistencias. Además, cada vez que anotó su equipo no perdió, destacando su aporte con lanzamientos dentro del área, que supusieron ocho tantos. En el balón detenido convirtió 4 tantos, los que aún no daban cuenta de su efectividad en esas instancias. Así, sumando el tanto de la fase inicial de Copa Libertadores de América, ‘Mati’ cerró un buen semestre con 15 anotaciones, que representaron el 20% de los 75 goles oficiales que señaló el equipo durante este período.
SEGUNDO SEMESTRE: CLAUSURA Y COPA SUDAMERICANA
El Torneo de Clausura presentó nuevos desafíos a Colo-Colo, que debía refrendar en cancha su condición de campeón y también coordinar esfuerzos para intervenir en la Copa Sudamericana, que vería el estreno de los albos en este certamen. En el caso de Fernández, no tuvo relevancia en el errático inicio del torneo local, participando con una asistencia en el empate 1 a 1 frente a Deportes Antofagasta y viendo las derrotas por 3 a 0 y 3 a 1 ante Everton y Palestino, respectivamente.
El miércoles 9 de agosto, en el estadio Monumental, se registró uno de los grandes hitos protagonizado por ‘Matigol’: en un arranque de habilidad, tras recibir un pase de Luis Mena, el volante empezó a eludir rivales y ante la salida del meta de O’Higgins, Héctor Barra, consumó el mejor tanto del certamen y del año, repetido hasta la saciedad en los resúmenes, dejando en evidencia que para entonces había abandonado su perfil de promesa y se encaminaba, con 19 años, a dominar la escena futbolera nacional.
El mes de agosto siguió transitando con mejores aires para Colo-Colo, que supo encadenar buenos resultados ante Coquimbo Unido, Unión Española y Rangers, obteniendo 7 de 9 puntos posibles, para dar paso, en el cierre de mes, a los juegos con Huachipato por Copa Sudamericana. En la ida, jugada en Concepción, Matías Fernández, tras habilitación de Suazo, igualó las acciones de un partido que se resolvió con triunfo del ‘Cacique’ por 2 a 1, en lo que sería uno de sus dos tantos con su pierna izquierda durante el año.
En la vuelta, Colo-Colo parecía encaminarse a una clasificación tranquila gracias al soberbio gol de tiro libre del mismo Matías que sentenciaba un 3 a 1 en el marcador global, sin embargo, la reacción de los ‘acereros’ forzó la tanda de penales, en la que el volante nacido en Argentina aportó con su gol desde los doce pasos,que sirvió para configurar el 5 a 3 definitivo, en una serie que nuevamente cerró Miguel Aceval. Para el recuerdo quedó la antológica jugada de Fernández habilitando de rabona a Humberto Suazo, momento en el que el delantero falló inexplicablemente su remate ante el ‘Tigre’ Cristian Muñoz, provocando una serie de elogios de los periodistas argentinos a cargo de la transmisión televisiva, quienes empezaban a descubrir las cualidades del ‘Crá’, como fue bautizado Fernández.
Septiembre arrojó nuevas sensaciones para los colocolinos, que empezaron a usar equipos alternativos para afrontar el torneo local, pensando en apuntar a la Copa Sudamericana, que comenzaba a ser vista con ambiciosos ojos por parte del cuerpo técnico, dirigencia e hinchada. De esta forma, Fernández siguió aportando a la meta del bicampeonato, con anotaciones ante Deportes Puerto Montt, Universidad de Concepción y Huachipato, todas con un denominador común: los penales. Incluso ante Universidad de Concepción falló uno, pero en el rebote señaló el tanto que colaboró al 4 a 2 final. En el terreno internacional, en tanto, Colo-Colo eliminó a Coronel Bolognesi, de Perú, y avanzó a Octavos de Final sin el aporte en las redes del ‘14’, quien vio en cancha los goles de José Luis Jerez y Arturo Vidal que sellaron la llave ante el equipo peruano, que en ese entonces era dirigido por Jorge Sampaoli.
Octubre vio la mejor producción individual y colectiva de Colo-Colo, al punto que su rendimiento local e internacional lo llevaron a ser considerado por la Federación Internacional de Historia y Estadísticas del Fútbol (IFFHS) como el mejor equipo del mundo el 4 de noviembre de 2006. ¿Cómo se resolvió este mes para los albos? A nivel grupal fueron tres partidos por la fase regular del Clausura: empates 2 a 2 con Santiago Morning y Cobreloa y un triunfo 4 a 2 a Universidad de Chile. En esos partidos, el volante colaboró con dos tantos (uno de zurda) y una asistencia a Humberto Suazo en la recordada goleada sobre la ‘U’. En el terreno continental, Colo-Colo despachó a Alajuelense (Costa Rica) con un marcador global de 11 a 2 (tres goles de Fernández) y a Gimnasia y Esgrima de La Plata (Argentina) con un agregado de 6 a 1, en el que la figura colocolina aportó con un gol y una asistencia. En suma, seis tantos y dos asistencias en un equipo que no fue derrotado en cinco partidos del torneo nacional y mismo número en la Sudamericana. Además, en ese ajetreado mes, el mediocampista fue parte de la selección chilena que venció 3 a 2 a Perú, señalando sus primeros dos goles por el combinado nacional. Finalmente, Fernández vería acción en ‘La Roja’ entre 2005 y 2018, totalizando 74 partidos, 14 goles y un título: la Copa América 2015.
La gran actuación del segundo semestre de Matías Fernández: en México ante Toluca anotó los dos goles que permitieron el avance albo a la final de la Sudamericana (Foto: EMOL)
Para noviembre, Colo-Colo derechamente comenzó a dosificar y a reservar a sus grandes nombres (Suazo, Fernández, Meléndez, David Henríquez, Sebastián ‘Terremoto’ Cejas) para la recta final de los torneos: playoffs del Clausura y semifinales de la Copa Sudamericana, lo que explica los irregulares desempeños domésticos que alcanzó el equipo ‘B’ del Cacique: 4 a 4 con Deportes La Serena en Macul, tras ir 4-0 arriba, derrota 2 a 3 con Audax Italiano, con dos goles de Fernández, y 1-4 con Cobresal, en el cierre de la fase regular. Entremedio, un exiguo triunfo por la cuenta mínima ante Universidad Católica permitió asegurar el paso a la postemporada. En el ámbito internacional, Colo-Colo venció a Toluca 2 a 1 en un partido que se disputó en el Estadio Nacional debido a una suspensión de Pedrero y 2 a 0 en México. En ambos triunfos brilló ‘Matigol’, quien señaló tres tantos y condujo a su equipo a una nueva final continental, esta vez frente al Pachuca mexicano.
Los últimos estertores de noviembre permitieron asegurar la clasificación a semifinales de postemporada ante Deportes Puerto Montt (1 a 0 en la ida de los Cuartos de Final, e ilusionarse con el 1 a 1 conseguido en México, en el primer partido de la final de ida de la Copa Sudamericana. Ya sin dosificar, y confirmado su pase al Villarreal español desde enero de 2007, Matías Fernández enrieló una fantástica actuación individual que permitió el bicampeonato albo con dos goles a Puerto Montt en el partido de vuelta, otros dos tantos y una asistencia frente a Cobreloa, en semifinales, y un gol de tiro libre y otra habilitación en la final frente a Audax Italiano. Pese a este buen desempeño en el ámbito interno, Colo-Colo vivió una gran decepción al perder la final de la Copa Sudamericana en el Estadio Nacional ante Pachuca, derrota que de todas maneras no alcanzó a opacar la enorme temporada de ‘Matigol’, quien conoció en la concentración previa al partido de vuelta con Audax de la designación como ‘El Mejor de los Mejores’ por parte del Círculo de Periodistas Deportivos de Chile, alzándose con el galardón ante ‘rivales’ de la talla del tenista Fernando González y el equipo de hockey femenino, conocido como Las Marcianitas’).
EL MEJOR JUGADOR DE AMÉRICA
Si la obtención del ‘Cóndor de oro’ coronaba un buen año para Fernández, diciembre vio la consagración del volante como el mejor jugador de América, según la tradicional encuesta realizada por el diario uruguayo El País. En la votación se impuso con 62 preferencias ante los argentinos Rodrigo Palacio y Fernando Gago, quienes acumularon 53 y 50 preferencias, respectivamente, logrando así destronar a Carlos Tévez, quien se había quedado de manera consecutiva con las tres últimas ediciones.
Este logro de ‘Matigol’ lo puso a la altura de Elías Figueroa (tres veces ganador) y Marcelo Salas (triunfador en 1997), con la salvedad de que Fernández alcanzó la distinción jugando en suelo nacional. Además, desde lo colectivo, Claudio Borghi se alzó como el mejor DT del año en Sudamérica y Humberto ‘Chupete’ Suazo remató en un meritorio quinto lugar.
Despedida a lo campeón, con el título del Clausura 2006. (Foto: Claudio Pozo/ AFP)
Fiel a su lacónico estilo, Fernández confesó en España, un día antes de cerrar el año y ya integrado a la disciplina del Villarreal de Manuel Pellegrini: “Estoy muy contento y quiero agradecerles especialmente a mis compañeros de Chile. Aprovecho para mandarles un saludo a todos”.
En cuanto a números, la temporada 2006 se resolvió para Matías Ariel Fernández con 55 partidos oficiales jugados (dos en Libertadores, 41 en torneos locales y 12 en Copa Sudamericana), 39 goles (29 por torneos locales, uno en Libertadores y nueve en Sudamericana, donde fue vicegoleador) y 11 asistencias. El repertorio goleador mostró a un Fernández decisivo a la hora de ponerse frente al balón en pelotas detenidas, puesto que 19 de sus anotaciones fueron por esa vía, ya sea de penal o tiro libre. Finalmente, la despedida del jugador, consumada el 23 de diciembre ante Audax Italiano (fue reemplazado en el minuto 86 por Miguel Aceval) dejó en las arcas de Colo-Colo una suma cercana a los 9 millones de euros, dos copas de campeón en las vitrinas de la institución, un subcampeonato continental y el encantamiento de la hinchada con un jugador de bajo perfil, que supo hablar en la cancha y se convirtió en un indiscutido para una generación que comenzaba a vincularse nuevamente con los éxitos deportivos, de la mano de un ‘Crá’ que se adueñó de la pelota ese inolvidable 2006.
Matías Fernández recibe en Villarreal, en febrero de 2007, el cetro que lo confirma como “Mejor de América” 2006. (Foto: Diario El País de Uruguay, febrero de 2007)
Agradecimientos:
- Claudio Herrera, El Mercurio
- Partidosdelaroja.com
- Revista Triunfo
- Suplemento Deportes de El Mercurio, 2006.
