Habituada a romper la red a punta de golazos y entre gambetas abrirse un espacio para disputar las hegemonías masculinas del deporte, dentro y fuera de las canchas, este Viernes 21 de Enero 2022, se dio a conocer la noticia de que la profesora de educación física de la UMCE, Alexandra Benado Vergara será la próxima Ministra del Deporte bajo el gobierno del electo presidente Gabriel Boric Font.
Son décadas de trayectoria las que avalan el posicionamiento ministerial de la ex seleccionada chilena. Nacida en 1976 en Estocolmo, Suecia, en un contexto familiar marcado por un exilio que posteriormente trasladaría a su familia a Francia, Alexandra Benado, su cercanía con el deporte comenzó de pequeña. Impulsada por su abuela, desde plena infancia practicó diferentes disciplinas como la gimnasia, tenis o natación, lo cual ayudó a su formación como deportista. No obstante, rápidamente se apasionó por el fútbol. Sus primeras pichangas las recuerda en las afueras de Burdeos en Francia, jugando junto a sus hermanos, primos y amigos, donde partió jugando al arco, hasta que poco a poco se fue abriendo un espacio, teniendo la oportunidad de jugar en otras posiciones y potenciar más su talento. Abrir espacios, parece ser la historia de su vida.
A los 9 años ingresó a una Academia de fútbol, en donde entrenaba junto a otros 500 niños en 2 canchas de fútbol. En su categoría sólo habian dos mujeres: ella y otra niña más, una experiencia bastante solitaria en relación con su propio género. Aunque eso no le impidió aprender y continuar mejorando día a día. Tras la muerte de su madre en Chile, su familia se trasladaría a Cuba, país en el que conocería de cerca y de forma experiencial un modelo deportivo que es un ejemplo para todo el mundo. Allí Alexandra estuvo durante 4 temporadas.
En 1991 a sus 14 años vuelve a Chile, donde comienza a jugar fútbol inmediatamente en el colegio Rubén Darío junto a sus compañeros. Con ellos disputa la liga comunal ‘Dragones de la Reina’, donde no sólo era la única mujer de su equipo, sino que también la única mujer del campeonato.
Su primera experiencia en fútbol femenino fue en 1993 con el Club Sportivo Milan de la comuna de Colina, club asociado a la gestión de una empresa que tuvo una breve participación, de tan solo 1 año en la competencia de fútbol femenino organizada por ANFA Metropolitana. En aquellos años y durante la década del 90´, la competencia era animada por equipos como Unión Española, Everton y Palestino. En este último, ficharía tras quedar su pase libre por la discontinuidad del Sportivo Milan. En el conjunto árabe, Alexandra Benado desarrollaría gran parte de su trayectoria, defendiendo la camiseta tricolor por 10 años, donde sería dirigida por distintos entrenadores, entre ellos el reconocido y actual entrenador de Palestino, Claudio Quintiliani, con quien saldría campeona del torneo el año 1996.
Plantel Palestino Femenino, década 1990 (Claudio Quintiliani)
A comienzos de 1994 con tan sólo 17 años, fue convocada a la selección femenina de fútbol de Chile, la cual se estaba reorganizando luego de la histórica participación de las pioneras en el Sudamericano de 1991 de Brasil. El llamado, coincidió con su tránsito desde Colina a Palestino a nivel de clubes, y es considerada como una convocatoria única y destacada, ya que era la más pequeña de las seleccionadas, en una época en donde no existían divisiones formativas, ni tampoco selecciones para esas categorías.
Alexandra Benado vistiendo la Roja Femenina (Archivo Personal Benado)
Su primer partido con la Roja Femenina lo hizo en calidad de sparring, mientras la selección adulta se preparaba para un partido contra Argentina. En tal ocasión anotó un gol, lo que le dio credenciales para la nominación directa al equipo adulto. Nuevamente Alexandra estaba abriendo cancha, esta vez para nuevas generaciones de futbolistas.
Con la selección viajaría al torneo amistoso Jayalalitha Cup en Madrás, India. Primer intercontinental, donde junto a destacadas pioneras como Ada Cruz y Cecila Bravo disputaría los partidos del grupo B que reunía a las selecciones de Hungría, Uzbekistán, Chile, y el local, India. Con dos triunfos y una derrota, la Roja Femenina sacó pasajes a semifinales, donde caería 2-1 frente a Rusia. Finalmente, el equipo dirigido por Sergio Rojas y Carlos Encina, obtuvo el tercer lugar del campeonato, debido a un walkover por parte de Hungria en el partido donde se disputaba aquél lugar.
En 1998 participaría del histórico Campeonato Sudamericano en Mar del Plata, donde tras 3 derrotas y con solo 1 triunfo, la selección chilena terminaría en la 4ta posición del grupo A, sin posibilidad de asistir al Mundial de Estados Unidos 1999.
Selección Chilena Femenina – ANFA 1998 (www.partidosdelaroja.com)
Paralelamente, comenzó a estudiar Educación Física en la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, donde también fue parte del plantel de honor del fútbol femenino. Como estudiante, fue pionera en organizar el primer cuadrangular de fútbol femenino a nivel universitario. Hoy, después de más de dos décadas, el fútbol universitario se destaca como un lugar de desarrollo y explosión del fútbol femenino nacional.
A comienzos de la década del 2000, fue también pionera en participar de seminarios y congresos compartiendo la experiencia chilena, incluso en eventos internacionales, como el seminario del Mundial Femenino que se desarrolló en EEUU en 2003. Siendo una de las jugadoras frecuentes en aparecer en los medios de comunicación de la época, denunció sin tapujos el machismo presente en el fútbol señalando que “el fútbol no tiene género” o que sus aspiraciones eran crear un “programa de desarrollo para el fútbol femenino”. Una postura, sin duda, rupturista para la época.
Sin embargo, como toda carrera deportiva, no todo son éxitos y avances. En 2003, decide retirarse, colgando los zapatos tras una complicada lesión que la tenía sin jugar y que le impidió participar del Sudamericano 2003 con la Roja Femenina, aún cuando era capitana. Pero aquello no la alejó del fútbol. Sino, todo lo contrario al contrario, se reinventa al inscribirse en la INAF para obtener el título de entrenadora de fútbol. A esta altura puede parecer una obviedad, pero es la primera mujer en cursar el título para poder dirigir en Chile, abriendo espacios femeninos nuevamente.
Superada su lesión, comenzaría su experiencia como entrenadora de fútbol, dirigiendo algunos equipos universitarios y también clubes, como Provincial Osorno, donde estuvo entre 2008 y 2009, años en que se desarrolla la transición entre el campeonato ANFA, Copa Fem y ANFP, principalmente gracias al anuncio de que Chile sería sede de la Copa Mundial de fútbol femenino sub 20 del 2008. Con este desafío, la ANFP contrata a la entrenadora Marta Tejedor, quien no dudaría en convocar a su selección adulta a Alexandra Benado por su experiencia y sapiencia del fútbol femenino nacional. Bajo su mando, participan de la Copa América 2010, donde Benado fue capitana, y Chile obtendría el tercer lugar. Un tremendo logro para sellar su carrera deportiva.
En los años posteriores seguiría relacionada con el fútbol femenino. Entre 2012 y 2016 sería parte de la Comisión de Fútbol Femenino de la FIFA, siendo la única representante de Sudamérica en el cargo. También trabajó en la organización del Mundial de Francia 2019, donde la Roja Femenina tendría una participación pionera.
Durante los últimos años desarrolló un importante activismo político, tanto en temáticas de Derechos Humanos, como en defensa de los derechos de la comunidad LGBTIQ+, de la cual forma parte y para quienes también está haciendo historia, al ser la primera ministra abiertamente reconocida como lesbiana.
Como Departamento de Fútbol Femenino ASIFUCH saludamos su nombramiento. Confiamos en que su liderazgo será un gran aporte y avance en la profesionalización del fútbol femenino en nuestro país, incorporando no tan sólo lo que ocurre dentro de las canchas, sino que también promueva el profesionalismo de instancias extradeportivas, con el objetivo de construir y fortalecer una cultura deportiva que respete y equipare las condiciones no sólo de las mujeres, sino que también de las diversidades y todo tipo de comunidades.
Como Ministra tendrá grandes desafíos no sólo en temáticas futboleras y de eventos, como el Sudamericano Fútbol Femenino Sub 20 de este 2022 a realizarse en nuestro país, o los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023. Sino que también, deberá liderar la Ley del Deporte Laboral, la actualización del currículo de educación física con enfoque de género en los establecimientos educacionales, fortalecer el deporte social, el fin del programa Estadio Seguro a cambio de promover el barrismo social y comunitario, para finalmente desarrollar e implementar un nuevo Modelo de Administración del Fútbol Profesional, que dignifique el fútbol femenino, el fútbol formativo, el fútbol sala y que por sobretodo devuelva la democracia a los clubes profesionales de fútbol, en donde socias, socias e hinchas puedan tener injerencia real en la toma de decisiones de las políticas desarrolladas en los hoy clubes empresas.
Si Alexandra Benado pasó décadas abriendo la cancha para la igualdad de género en el deporte, hoy le toca achicarle la cancha a la opresión, la corrupción y la exclusión. Esperamos que, en esta oportunidad, vuelva a gambetear y convertir un golazo que rompa la red de la privatización del deporte chileno.
Alexandra Benado Vergara en su anuncio como Ministra del Deporte 2022 (Agencia UNO)