Creada en 1992 para darle ritmo competitivo a equipos poco acostumbrados a jugar la copa Libertadores (cuando aún asistían dos representantes por país), la Copa CONMEBOL fue un torneo que nunca pudo arrimársele a la Libertadores como lo hizo la copa UEFA con la Liga de Campeones en Europa (quizás el espíritu original de la iniciativa).
En el caso de los equipos chilenos, estos accedieron de diversas vías al certamen, contando con la participación de O’Higgins (1992), Colo Colo (1993), Universidad de Chile (1994 y 1997), Cobreloa (1995 y 1996), Audax Italiano (1998) y Deportes Concepción (1999). Precisamente en la última edición del certamen se registró la recordada incursión de los penquistas en la competición, alcanzando las semifinales y dejando la impresión de que con un poco más de fútbol, suerte y goles podría haber llegado a instancias superiores.
[Jorge Torres, figura de Deportes Concepción en la copa CONMEBOL 1999: autor de un gol y partícipe de los cuatro partidos del equipo en el torneo. Crédito: Andrés Piña. Revista Don Balón N° 390, 1999]
La convivencia de la Copa CONMEBOL con la Copa Mercosur (desde 1998) y antes con la Supercopa la dejaron siempre relegada a un plano de desinterés que para fines de siglo hicieron que los países envíen como representantes de desconocidas copas locales (como Brasil) o al decimosexto clasificado en la temporada 1998-1999 (caso Argentino). Chile no escapó a esos avatares y el “León de Collao” pudo acceder a la copa como resultado de haber sido sexto en la primera rueda del torneo 1999, tras la negativa de Cobreloa (4°) y Cobresal (5°) de ir al torneo por razones económicas. Los del Bio Bío se encontraban enfocados en asegurar la permanencia en Primera División, tarea que les resultaría relativamente fácil por el buen “colchón” de puntos asegurados en la fase regular, que hacía poco probable la opción de enredarse con los últimos lugares de la tabla y asistirían a su segunda presencia internacional tras el estreno en la copa Libertadores de 1991.
El martes 12 de octubre de 1999 se registró el inicio de la competición para los chilenos, enfrentando a Rosario Central en el Gigante de Arroyito. La recompensa para quien resultase ganador de la llave era demasiado importante: firmaría automáticamente el avance a semifinales, dada la renuncia de River Plate y Rentistas, equipos uruguayos que desistieron por razones económicas de jugar la última edición de la copa. También se confirmó el retiro de Independiente de Medellín. Y como decíamos más arriba, Brasil “despreció” esta edición (en parte porque los equipos “grandes” jugaban en la Mercosur) enviando a subcampeones regionales (Paraná y Vila Nova), además de Sao Raimundo y el Club Sportivo Alagoano, al que solo le bastó manifestar su intención de participar, lo cual fue aceptado por la CBF (Confederación Brasileña de Fútbol). Volviendo al equipo nacional, éste pretendía mostrar algunos interesantes valores de esa temporada, como Marco Bautista y Víctor Cancino, que podrían alcanzar eventuales traspasos a equipos foráneos. En el lado de Rosario Central, se disponía a afrontar la llave con equipo reserva debido a su lucha por el torneo local, donde figuraba a dos puntos del líder Boca Juniors en el torneo Apertura ’99.
[Luis Chavarría ensaya una espectacular maniobra en la vuelta ante Rosario Central. Arremeten Marcelo Caro y Luis Guajardo. Crédito: Andrés Piña. Revista Don Balón 390, 1999]
En cuanto al juego en sí, Deportes Concepción dejó escapar de manera increíble un triunfo histórico en los siempre difíciles campos argentinos. Tras la apertura de la cuenta conseguida por Luis Guajardo en el minuto 50 de partido, parecía que los lilas retornaban a Chile con un histórico triunfo, sin embargo, un infortunado autogol de Jorge Torres en el minuto final puso el empate en el juego (desvió un centro de Ezequiel González y descolocó a Mele). El mismo Torres enmendó su error convirtiendo en gol una falta penal cobrada por el discreto juez paraguayo Ricardo Grance, quien sancionó foul sobre Ramón Tapia en los descuentos. Finalmente, en el cuarto minuto de descuento un nuevo penal, ahora sobre Pierucci fue cobrado de manera discutible por el juez, permitiendo el empate “canalla” en los pies de Juan Antonio Pizzi (como referencia, Grance sancionó un off side desde lateral en la final de ida de la copa Sudamericana 2007 entre América de México y Arsenal de Argentina) que de todas maneras le daba la primera opción de avanzar a los chilenos.
“Somos los últimos representantes del fútbol chileno en un torneo internacional” fue el discurso que sostuvieron los jugadores al retornar a Chile, en opiniones dadas a El Mercurio, mientras que el técnico Óscar del Solar señalaba al mismo periódico que “está claro que nuestra ilusión pasa por la CONMEBOL. Si bien algunos no le dan importancia, yo le doy la mayor porque para clubes como el nuestro no es habitual llegar a estas instancias”. En la misma línea, Luis Guajardo opinaba que “éramos varios los que jugábamos nuestro primer partido en un torneo internacional… por eso es valioso todo lo que jugamos. Y el empate fue conseguido en circunstancias bien extrañas”. Dando rápida vuelta a la página, el equipo visitó Iquique para iniciar su paso por el octogonal por la permanencia (había postergado su partido de la fecha 1). Un empate 1-1 con Deportes Iquique permitió seguir enfocados en el objetivo internacional.
Rosario Central 2 – 2 Deportes Concepción
12/10/1999. Primera Fase, ida, Copa CONMEBOL 1999. Estadio: Gigante de Arroyito, Rosario (Argentina) Público: 10 mil aprox. Árbitro: Ricardo Grance (Paraguay)
ROSARIO CENTRAL (2): Laureano Tombolini; Gabriel Loeschbor, Germán Rivarola, Daniel Díaz, Diego Erroz, Davis Pérez, Federico Arias (Ezequiel González 54’), Líber Vespa, Fernando Pierucci, Cristian Colusso (Juan Antonio Pizzi 54’), Arnaldo Quiroga (Iván Moreno y Fabianesi 65’) DT: Edgardo Bauza.
DEPORTES CONCEPCIÓN (2): Claudio Mele; Mauricio Pozo, Pedro Jaque, Mauro Donoso, Jorge Torres, Luis Chavarría, Víctor Cancino, Luis Guajardo (Daniel Cangialosi 71’), Marco Bautista, Eric Lecaros (Ramón Tapia 71’) y Pedro González Pierella (Mauricio Illesca 60’) DT: Óscar del Solar
Goles: Guajardo 80’, Torres 90+2’ de penal (CON). Autogol de Torres 85’ y Pizzi 90+4’ (ROS)
Tarjetas amarillas: Díaz, Vespa, Moreno y Fabianesi y Pierucci (ROS). Guajardo, González, Mele, Chavarría y Cangialosi (CON).
La vuelta fue un partido que puso a prueba a Deportes Concepción en su afán por clasificar a sus primeras semifinales en un torneo internacional. Desde el inicio, los nervios se hicieron presentes en el estadio de avenida Collao, pues una de las cuatro torres de iluminación no funcionó, lo cual llevó al árbitro paraguayo Carlos Torres a esperar un tiempo prudente para luego dar inicio al encuentro sin la correcta y completa iluminación requerida. Los goles cayeron en el complemento y aunque Rosario Central le puso emoción al cierre del partido con su descuento, éste no alcanzó a inmutar a los penquistas que protegieron la ventaja que los llevó directo y sin escalas a semifinales del torneo donde los esperaban otros argentinos: Talleres de Córdoba, que había despachado a Independiente Petrolero (Bolivia) y Paraná (Brasil) para anotar su nombre en la etapa previa a la final del certamen. “Fuimos superiores a Central, a pesar de los cobros discutibles del árbitro paraguayo en Argentina, demostramos que éramos un gran equipo con buenas individualidades y trabajo en equipo” rememora Mauricio Pozo, titular indiscutido en esa campaña y hoy comentarista de televisión.
Deportes Concepción 2 – 1 Rosario Central
20/10/1999. Primera Fase, vuelta, Copa CONMEBOL 1999. Estadio: Municipal, Concepción. Público: 7 mil aprox. Árbitro: Carlos Torres (Paraguay)
DEPORTES CONCEPCIÓN (2): Claudio Mele; Pedro Jaque, Jorge Torres, Marco Bautista, Mauricio Pozo (Eric Lecaros 46’), Luis Chavarría, Víctor Cancino (Luis Aravena 90’), Mauro Donoso, Luis Guajardo, Marcelo Caro (Alejandro Vrsalovic 62’) y Pedro González Pierella DT: Óscar del Solar.
ROSARIO CENTRAL (1): José María Buljubasich; Damián Marra, Gabriel Loeschbor, Germán Gerbaudo (Javier García 82’), Javier Capeletti (Fernando Pierucci 75’), Maximiliano Cuberas, Daniel Quinteros, Iván Moreno y Fabianesi, Ezequiel González, Juan Antonio Pizzi y Rafael Maceratesi DT: Edgardo Bauza.
Goles: Bautista 58’ y Guajardo 83’ (CON). Moreno y Fabianesi 84’ (ROS)
Tarjetas amarillas: Chavarría, Jaque y Cancino (CON). Gerbaudo, Quinteros, E. González, Marra y Capeletti (ROS).
Tarjetas rojas: Lecaros 89’ y Jaque 90’ (CON).
[Víctor Cancino rechaza el balón ante la presencia de Rafael Maceratesi y la atenta mirada de sus compañeros Mele, Guajardo y Bautista. Crédito: Andrés Piña, Revista Don Balón 390, 1999]
Alcanzado el histórico objetivo de semifinales, se confirmó que el rival sería Talleres de Córdoba, dirigido por Ricardo Gareca en lo que fue su primera incursión como director técnico. Las fechas de los cruces ante los argentinos se establecieron en la segunda quincena de noviembre y coincidieron con el buen momento que vivía Deportes Concepción en el torneo local, habiendo asegurado con tiempo su permanencia en la división de honor, liderando el temido octogonal por no descender.
En la víspera del duelo de ida, disputado en el Olímpico de Córdoba (mismo estadio del recordado 4-0 de Chile a Brasil en la Copa América de 1987), el DT Óscar del Solar lamentó las bajas de Darwin Pérez, Daniel Cangialosi, Ramón Tapia, Pedro Jaque y Eric Lecaros (los dos últimos, suspendidos). En la misma línea, el técnico nacional declaró a El Mercurio que “Talleres es un equipo de muy buen rendimiento, con una estructura de un año y medio, a la que incorporaron tres o cuatro elementos que le han dado un nivel bastante alto”. El análisis del entrenador penquista se sustentaba en el buen presente de la “T”, como es conocido el equipo argentino, que marchaba cuarto en la liga argentina.
El partido de ida tuvo dos actos claramente marcados: en la primera etapa Concepción sorprendió a los casi 25 mil hinchas argentinos que esperaban un rápido trámite por parte de Talleres y que se fueron al entretiempo con la preocupación de la desventaja, obra de Pedro González Pierella antes de la media hora de juego. Tras la reanudación, Talleres se adueñó de las acciones del partido y empujados por el desempeño de Nicolás Oliva encontró los dos tantos que desnivelaron el marcador en favor de los trasandinos, que se quedaron con el primer “chico” de la serie por un ajustado triunfo que abría posibilidades de remontada y avance a una histórica instancia final de torneo internacional para los penquistas, que nuevamente lamentaron dos expulsiones (Iván Cañete y Marcelo Caro).
Talleres 2 – 1 Deportes Concepción
17/10/1999. Semifinales, ida. Copa CONMEBOL 1999. Estadio: Olímpico, Córdoba (Argentina). Público: 25 mil aprox. Árbitro: René Ortubé (Bolivia)
TALLERES (2): Mario Cuenca; Silvio Suárez, Julián Maidana, Víctor Hugo Sotomayor (Sebastián Flores 65’), Horacio Humoller, Cristian Pino, Andrés Cabrera, Manuel Aguilar (Nicolás Oliva 46’), Rodrigo Astudillo y José Luis Marzo (Cristian García 69’) DT: Ricardo Gareca.
DEPORTES CONCEPCIÓN (1): Claudio Mele; Marco Bautista, Jorge Torres, Mauro Donoso, Mauricio Pozo (Eric Olivares 90’), Luis Aravena (Víctor Cancino 55’), Luis Chavarría, Iván Cañete, Luis Guajardo, Mauricio Illesca (Marcelo Caro 67’) y Pedro González Pierella DT: Óscar del Solar.
Goles: González P. 21’ (CON); Maidana 51’ y Oliva 65’ (TAL)
Tarjetas amarillas: Astudillo (TAL). Mele, Bautista, Cañete y González P. (CON)
Tarjetas rojas: Cañete 80’ y Caro 89’ (CON)
La vuelta de la serie, con escena en el estadio de Avenida Collao, ilusionó a los chilenos, que apelaron al exiguo ahorro conseguido por Talleres con su victoria 2-1. Además, los argentinos llegaron a la definición con un 4-1 en contra conseguido ante River Plate por el torneo argentino, lo cual aumentó la expectativa por revertir la serie y avanzar a la definición del certamen, que tenía la certeza de que sería ante un rival brasileño pues Sao Raimundo y Alagoano definieron al otro finalista: “estamos muy motivados y creemos que podemos revertir el resultado de Córdoba. Tenemos las armas para hacerlo. Lo importante es mantener la tranquilidad durante los 90 minutos” declaraba el estratega Óscar del Solar.
El partido en Concepción fue muy nervioso y estudiado. Talleres enfrentó de mejor manera los primeros 45 minutos y se propició las mejores opciones de gol en los pies de Rodrigo Astudillo (refuerzo de Universidad de Chile en 2006) y José Luis Marzo. Por el lado de los locales, estos nunca pudieron acercarse con riesgo a la portería de Mario Cuenca. Tras la reanudación de las acciones fue Astudillo quien señaló la apertura de la cuenta (que dejaba 3-1 el global en favor de Talleres) aumentando la presión en los penquistas que solo llegaron a la igualdad tras una desordenada jugada en el área que capitalizó finalmente Mauricio “Bototo” Illesca cuando se cumplía la hora de partido. Después del gol lila no hubo más opciones de peligro y la “T” se limitó a hacer correr el reloj en su favor, desesperando a los locales que no pudieron conseguir el gran premio de llegar ante la final ante un elenco de tercera división brasileña, que sería el rival en la definición.
Deportes Concepción 1 – 1 Talleres
24/11/1999. Semifinales, vuelta. Copa CONMEBOL 1999. Estadio: Municipal, Concepción. Público: 8 mil aprox. Árbitro: Carlos Amarilla (Paraguay)
DEPORTES CONCEPCIÓN (1): Claudio Mele; Pedro Jaque, Jorge Torres, Marco Bautista, Mauro Donoso, Luis Chavarría, Luis Aravena (Darwin Pérez 77’), Mauricio Pozo (Eric Lecaros 46’), Luis Guajardo, Mauricio Illesca y Pedro González Pierella DT: Óscar del Solar.
TALLERES (1): Mario Cuenca; David Díaz, Julián Maidana, Cristian García, Horacio Humoller, Gustavo Lillo (Adrián Ávalos 58’), Manuel Aguilar, Andrés Cabrera, Cristian Pino (Ricardo Silva 62’), Rodrigo Astudillo y José Luis Marzo (Nicolás Oliva 73’) DT: Ricardo Gareca.
Goles: Astudillo 48’ (TAL). Illesca 60’ (CON)
Tarjetas amarillas: Jaque, Illesca, Chavarría y Aravena (CON). Humoller, Marzo y Pino (TAL).
La definición del torneo permitió a Talleres acceder a su primer (y hasta ahora) y único título internacional. Los de Gareca cayeron 4-2 en la ida ante Alagoano y vencieron 3-0 en Córdoba, inaugurando su palmarés aún antes de hacer lo de manera doméstica (nunca han sido campeones en Argentina). El torneo se discontinuó para el nuevo siglo, quedando la Copa Mercosur como relevo natural pero que no alcanzó a prosperar ni a motivar a la hinchada dado su carácter altamente marcado por lo comercial (era un torneo por invitación). Recién en 2002 la Copa Sudamericana relevaría lo que alguna vez fue la Copa CONMEBOL, sumando a la fecha dos décadas que la han consolidado como el segundo torneo en importancia en el subcontinente. En la hora de los balances, la extinta competición dejó poco que recordar para los equipos chilenos: la vibrante llave entre Colo Colo y Vasco da Gama (Brasil) en 1993, las semifinales de Universidad de Chile en 1994, la goleada de 7-2 de Cobreloa a Ciclista de Lima (Perú) en 1995 y la actuación de Deportes Concepción se alzan como los hitos más relevantes de una competencia que siempre estuvo lejos del alcance de los equipos chilenos y que como antes, repartió su botín entre equipos argentinos (Rosario Central, Lanús y Talleres) y brasileños (Atlético Mineiro, Botafogo, Sao Paulo y Santos).
[Plantel de Deportes Concepción 1999. De pie, de izquierda a derecha: Daniel Cangialosi, Jorge Torres, Ricardo Ormeño, Raúl Imilpán, Claudio Mele, Marcos Saldías, Marco Bautista, Luis Guajardo, Pedro Jaque y Mauro Donoso. Sentados: Eric Lecaros, Luis Chavarría, Pedro González Pierella, Justo Farrán (PF), Óscar del Solar (DT), Gustavo Viveros (AT), Alejandro Vrsalovic, Pablo Bolados y Mauricio Pozo. Abajo: Marcos Lencina, Andrés González, Eric Olivares, Darwin Pérez, Ramón Taía, Iván Cañete y Víctor Cancino. Obtenido de https://anotandofutbol.blogspot.com/2013/01/deportes-concepcion.html ]
Fuentes consultadas:
- Revista Don Balón, 1999.
- Cuerpo Deportes El Mercurio, octubre y noviembre de 1999.
- Revista Triunfo, 1999.
- Entrevista con Mauricio Pozo, ex jugador de Dep. Concepción
- https://anotandofutbol.blogspot.com/