Mucho se discute cual es el mejor estadio del mundo, tanto en ambiente como en ubicación geográfica y entre ellos es inevitable no señalar al Chinquihue ubicado en la ciudad de Puerto Montt.
A principios del siglo pasado, 1920, la mayoría de la actividad futbolística se desarrollaba en las canchas que existían en el Valparaíso Sporting Club de Viña del Mar y uno de esos fue el torneo sudamericano de naciones (actual Copa América) y además, donde los players locales se dirigían sagradamente todos los fines de semana para participar y ver los encuentros que allí acontecían. Dado este hecho, era imperativo tener un field que cumpliera los estándares para desarrollar ese tipo de actividades masivas sin tener que realizar el traslado a la ciudad vecina. A pesar que, por ejemplo, los cerros Playa Ancha y Las Zorras contaban con canchas para disputar encuentros, no eran lo suficientemente “central” y grandes para que los habitantes fueran y disfrutaran de las actividades que se podían encontrar, es así que, gracias a la Asociación de Football de Chile y junto a la Asociación de Ferroviarios, quienes facilitaron los terrenos donde se desplazaría el nuevo recinto a los pies del Cerro Baron, el 13 de agosto de 1922 nace el que sería la nueva casa del futbol porteño, el Estadio Ferroviario de Valparaíso, con una capacidad de 12.000 espectadores, donde contaba de 2 galerías y una tribuna central de madera que formaban una “C”, con una vista única e insuperable a orillas del océano Pacifico. Este recinto ayudo mejorar las necesidades deportivas de la ciudad, ya que, no solo futbol se practicaba, sino que a la vez contenía una pista atlética para que otros deportistas realizaran sus actividades y no solo eso, también sirvió como centro recreativo al albergar diversas actividades artísticas desde el extranjero, como también las diversas actividades bomberiles que se desarrollaban en la ciudad puerto y otros deportes como el box.
Este estadio, vivió jornadas memorables, receptor de muchos inter cities, algunos maches internacionales y por supuesto, encuentros entre los clásicos clubes del puerto porteño quienes daban todo para dejar en alto los colores de la escuadra que representaban. Uno de esos clubes, era el Valparaíso Ferroviarios quienes en el año 1927 se coronaron campeones de la liga de Valparaíso y tuvieron la grandeza de al año siguiente derrotar en Santiago al gran Colo-Colo, quienes venían de una exitosa gira a Europa y vencieron por 4 goles contra 2.
En 1928 acontece una de las más hermosas jornadas deportivas que se tenga registro de aquel año, ya que, después de la espléndida actuación que tuvo el Atleta Manuel Plaza en los juegos olímpicos de Ámsterdam, participo en una jornada deportiva en honor a su persona luego de haber concluido la cita de los anillos.
A pesar de todos los antecedentes y amplio apoyo en las tribunas a todas las actividades que se congregaban en este recinto, la modernización y ampliación de ferrocarriles y dado el lugar en donde se encontraba ubicado, el año 1929 comenzó el desmantelamiento de este gran estadio, tal vez, con los mejores asientos que jamás pudo haber tenido.
