La temporada 1997 reencontró a Universidad Católica con el título nacional, que se le había negado por nueve torneos después del brillante campeonato alcanzado en 1987. Con el estreno del formato “a la argentina” para 1997, a los cruzados les bastaron 17 partidos para asegurar la corona ante Colo-Colo, en un títiulo que recién se definió para los de la franja en una recordad definición, la que se consumó en el Estadio Nacional el 10 de julio con un 3-0 que aún resuena en la precordillera.
Con su séptima estrella en el bolsillo, Universidad Católica aprovechó el receso por la fecha clasificatoria a Francia 98, en la que Chile se mediría con Uruguay en Montevideo (20 de agosto de 1997), cuando Fernando Carvallo y sus hombres partieron a Argentina a tomar parte del cuadrangular internacional amistoso denominado Torneo de Invierno, donde se medirían ante Boca Juniors, Racing e Independiente, tres equipos que enfrentaban un presente opaco en cuanto a la figuración local (la liga trasandina era dominada en esos años por Vélez Sarsfield y River Plate, que había asegurado recién el título del Clausura 1997), pero que de igual forma acumulaban un palmarés envidiable para nuestro fútbol, siendo históricamente vistos como referentes del fútbol trasandino por sus inagotables canteras y referentes, destacando en Boca Juniors a Claudio Caniggia, Diego Maradona y Juan Román Riquelme; en Racing a Marcelo Delgado como delantero y a Alfio ‘Coco’ Basile en la banca; y en Independiente al colombiano Faryd Mondragón en el arco y a Ricardo Gareca como director técnico.
Con un formato sencillo, la primera edición del torneo se estructuró con dos duelos semifinales: Racing frente a Independiente, en el clásico de Avellaneda, y Boca Juniors ante Universidad Católica, en la que sería la tercera vez de Diego Armando Maradona jugando por clubes ante un equipo chileno. Las anteriores habían sido defendiendo a Argentinos Juniors ante Colo-Colo en 1980 (2-3), y a Boca Juniors frente a Universidad de Chile en 1995 (2-4), ambas derrotas en Chile para el ‘Pelusa’ y sus cuadros. El mítico jugador argentino acumulaba además cuatro encuentros con la selección argentina ante su similar chileno: empates 2-2 y 3-3, en Chile en 1980 y 1994 respectivamente, ambos amistosos, y triunfos de 2-0 en otro amistoso en 1985 en Argentina, y de 1-0 en la Copa América de Brasil en 1989.
El domingo 17 de agosto, mientras la afición chilena empezaba a mirar tímidamente hacia Montevideo por el decisivo lance premundialista, Racing e Independiente abrieron los fuegos del Torneo de Invierno con un lánguido empate sin goles, donde solo un par de jugadas de riesgo animó a los valientes que se animaron a llegar a ‘El Cilindro’ de Avellaneda, como es conocido el estadio Presidente Perón. Finalmente, en la definición a penales, los dirigidos por el ‘Tigre’ Gareca despacharon a la ‘Academia’ por 7-6, asegurando su paso a la final del certamen.
Un día después se verificó el partido de Boca Juniors y la ‘UC’. En la previa, ambos equipos hacían noticia con distintos matices: Universidad Católica salía a blindar a Caté, tras una fallida prueba en el Vitesse holandés, mientras que fuera de la cancha se buscaba prohibir la venta de abonos a los hinchas por relacionarse con una práctica monopólica, sobre todo para los hinchas visitantes, en San Carlos de Apoquindo. ‘Boca’, por su parte, anunciaba el arribo del mexicano Luis Hernández, quien junto al ‘Pájaro’ Caniggia y a Sebastián Rambert eran las cartas de gol que buscaban devolver la alegría extraviada desde 1992 a la parcialidad xeneize.
A las 17:15 horas del lunes 18 de agosto, en la Bombonera, se dio inicio a la incursión cruzada, los que tendrían dos alternativas tras medirse a ‘Boca’: retornar de inmediato a Chile en caso de perder (no estaba considerada la definición del tercer lugar) o hacerlo el jueves 21 tras jugar una hipotética final ante Independiente. El inicio del partido fue inmejorable para los chilenos, los que a los 90 segundos encontraron el primer gol tras un gran centro de Andrés Romero desde la derecha, el que no fue interceptado por Cristian Traverso dejando servida la conversión a David Bisconti, que extendía su gran presente goleador del torneo de Apertura chileno, ahora en La Bombonera. El gol fue un espaldarazo potente para los chilenos, que empezaban de manera inmejorable el partido. Boca Juniors, lejos de amilanarse con el resultado en contra, puso en juego la constelación de figuras que iría por el título del Apertura ’97. A los 8 minutos, Diego Armando Maradona superó en una vistosa maniobra a Jaime Pizarro, logrando extender el pase ante Julio César Toresani, quien luego habilita a Sebastián Pascual Rambert, el que es infraccionado en el área por Dante Poli. Penal y La Bombonera se viene abajo pidiendo a Maradona en la ejecución, pero “El 10”, en un acto de generosidad con el recién llegado ‘Pascualito’, le cede el balón. El penal, ejecutado de manera predecible y liviana por el delantero boquense, encontró la rápida reacción de Álex Varas, quien se lanzó a su derecha para mantener la cuenta 1-0 en favor de los chilenos. Segundos después del penal, Rambert tuvo la ocasión de resarcirse, pero su cabezazo, que señalaba el empate transitorio, fue anulado por el árbitro Óscar Sequeira por infracción del delantero.
El primer tiempo transcurrió con fallidos intentos cruzados por acercarse a la valla de ‘Boca’, mientras los argentinos convertían a Álex Varas en figura, transmitiendo inusitada seguridad en el arco chileno y ahogando las aspiraciones ofensivas de un frustrado Sebastián Rambert. Por otra parte, Alberto Acosta era la exclusiva preocupación de la zaga argentina, mientras que Ricardo Gabriel Lunari se adueñaba de las acciones chilenas en mediocampo y alzándose como figura destacada en el partido. El ‘Cadi’ evoca: “En ese partido todos esperaban el triunfo de Boca por sus figuras: Maradona, Riquelme, Caniggia, Latorre… Fue un partido parejo, con una fiesta en La Bombonera que nosotros arruinamos… Fue un partido importante, nosotros veníamos de ser campeones (del Apertura 1997) y recuerdo grandes actuaciones de Álex Varas, Dante Poli, Mario Lepe y Jaime Pizarro. Aunque en general en lo colectivo fue un partido que nos mostró a un alto nivel” (Entrevista al autor, 1 de junio de 2025).
Recién en el minuto 29 Diego Latorre ingresó por izquierda al área cruzada, y con un doble enganche ante Andrés Romero enfrentó a un dubitativo Álex Varas que falló por vez primera en el encuentro. El empate acrecentó las aspiraciones boquenses, empezando a encontrarse el tándem Riquelme-Maradona en el partido. A los 35 minutos, el ‘Beto’ Acosta enfrentó a Abbondancieri (en aquel momento aún no cambiaba su apellido a Abbondanzeri, como fue conocido después) y elevó una inmejorable opción. Tras ello, Maradona dispuso de dos tiros libres frontales que elevó, en las que fueron sus primeras intervenciones de golpe franco hacia el arco chileno.
Antes de iniciar el segundo tiempo la transmisión oficial capturó la voz de Diego Armando Maradona, quien reconoció que: “Boca jugó bastante bien (el primer tiempo). Ellos están rodados y a nosotros nos falta mucho y por supuesto que faltan refuerzos que venimos pidiendo, pero no podemos dormirnos tanto” (Declaraciones a la transmisión oficial del partido).
El complementó arrancó con doble cambio en el equipo chileno: Alejandro Osorio y Aníbal ‘Tunga’ González ingresaron por Luis Pérez y Alberto Acosta respectivamente. Lo del ‘Beto’ obedeció a un esguince de tobillo que obligó a tomar precauciones ante el segundo semestre que se avecinaba para la ‘UC’, donde tendrían que defender el título, en lo que sería la única actividad del plantel en cuanto a competiciones. Además, hubo que hacer frente a la pesada cancha que empezó a exhibir La Bombonera, lo que se reflejaba en el barro que se empezó a formar en sectores de la cancha y en el blanco uniforme cruzado. Recién pasada la hora de juego David Bisconti pudo acercarse al arco argentino con un tiro libre que no trascendió. Pese al evidente dominio en posesión de ‘Boca’, en el minuto 63 Ricardo Lunari envió un preciso centro desde derecha al ‘Tunga’, que se anticipó a Traverso y con un certero cabezazo puso el 2-1 en momentos en que, quizás sin merecerlo, los chilenos supieron golpear con un nuevo tanto. El gol hizo crecer en confianza al equipo chileno: Caté, Lepe y Lunari seguían con su juego de toque rápido, sorprendiendo al técnico Héctor Veira, quien realizó tres cambios promediando el complemento, los que parecían no funcionar en un cansado mediocampo, donde Diego Maradona parecía naufragar físicamente, apelando exclusivamente a las pelotas paradas como argumento para lucir su inoxidable talento. En 30 minutos de la segunda parte Álex Varas refrendó su excelente presentación sacando en la raya un preciso cabezazo de Diego Latorre. Los 15 minutos finales fueron muy inteligentes desde lo táctico por parte de los chilenos, los que maniataron e hicieron poco trascendente el mediocampo rival, que cayó lentamente en la desesperación.
En 83 minutos, un rápido encuentro entre Lunari, Bisconti y Osorio se tradujo en un lanzamiento penal ejecutado precisamente por David Bisconti, quien encontró su segundo gol en el partido tras malograr el tiro, pero encontrando rápidamente el rebote que le permitió batir al ‘Pato’ Abbondancieri, con quien había coincidido en Rosario Central años antes. Con el 3-1 en el bolsillo Universidad Católica se encerró asediado por la desesperación de los argentinos, que apostaron a bombardear el área de la ‘UC’ con centros. Precisamente en el minuto 86 Rodolfo Arruabarrena capitalizó un centro de Maradona, sentenciando el que sería el resultado final. Con más desorden que precisión, los últimos minutos fueron un constante asedio xeneize sobre la valla de Varas, pero fue ese momento en el que la presencia de Mario Lepe en el mediocampo se hizo vital para contener los embates del rival. La voz del capitán cruzado, a casi 30 años del histórico resultado es clara: “Jugar en La Bombonera, ante Boca y Maradona, con quien tuve la suerte de estrechar las manos y conversar, fue muy importante para todos. Pese a lo amistoso del partido, nos plantamos bien ordenados e hicimos frente a la dinámica de Boca, llegando a superarlos en muchos momentos. Fue un partido redondo y bien planificado, nos metimos atrás porque salimos a buscar el resultado, ya que contábamos con jugadores para hacerlo” (Entrevista del autor, 3 de junio de 2025).
La definición del certamen, que enfrentó a los cruzados con Independiente (vencedor de Racing en la otra llave vía penales tras igualar sin goles ) se tradujo en un accidentado partido que fue suspendido por el juez Javier Castrilli cerca de la hora de juego cuando, con el resultado 2-0 en favor de Independiente, parciales de “Los Diablos Rojos” comenzaron a hostilizar al arquero Álex Varas con insistentes y peligrosos piedrazos. Los goles de Daniel Garnero y Gustavo Reggi sellaron el título para los argentinos, lo que a esa altura poco importaba a los cruzados, quienes regresarían a Chile con la satisfacción de haber conseguido un triunfo en tierras trasandinas, lo que a cualquier nivel era poco visto por esos años (considerar que Colo-Colo un año antes había obtenido recién el primer triunfo oficial de un club chileno en Argentina al vencer 4-2 a Estudiantes de La Plata). Años más tarde, y siempre por los puntos, la ruta abierta por esos años la seguirían Everton, Universidad de Chile, Unión La Calera, Deportes Antofagasta, Huachipato y los propios cruzados, en tres oportunidades.
BOCA JUNIORS 2-3 UNIVERSIDAD CATÓLICA
18/08/1997. Semifinal Copa de Invierno 1997. Estadio Antonio José Armando, “La Bombonera”. Público: 20.000 aprox.
Árbitro: Óscar Sequeira, secundado por Abraham Serrano y Darío García.
BOCA JUNIORS: Roberto Abbondancieri; Sergio Castillo (56’ César La Paglia), Cristian Traverso, Néstor Fabbri (46’ Aníbal Matellán), Rodolfo Arruabarrena, Julio César Toresani, Alfredo Berti, Juan Román Riquelme, Diego Latorre, Diego Armando Maradona y Sebastián Rambert (61’ Sergio Martínez). DT Héctor Veira.
UNIVERSIDAD CATÓLICA: Álex Varas; Andrés Romero, Miguel Ramírez, Dante Poli, Nelson Garrido (60’ Caté), Mario Lepe, Jaime Pizarro, Luis Pérez (46’ Alejandro Osorio), Ricardo Lunari, David Bisconti y Alberto Acosta (46’ Aníbal González). DT Fernando Carvallo.
GOLES: 2’ y 83’ D. Bisconti (UC), 29’ D. Latorre (BJ), 63’ A. González (UC) y 86’ R. Arruabarrena (BJ).
Amarillas: BJ: Traverso y Berti; UC: Lepe.
Incidencias: 10’ Varas (UC) atajó penal Rambert (BJ); 83’ Abbondancieri (BJ) atajó un penal a Bisconti (UC) que convirtió tras el rebote.
Fuentes:
– Suplemento Deportes de El Mercurio (19 y 21 de agosto de 1997)
– Revista El Gráfico N° 4067, 28 de agosto de 1997
– Revista Solofútbol N° 636, 25 de agosto de 1997
– Entrevista del autor a Ricardo Lunari
– Entrevista del autor a Mario Lepe
– www.futbolsinpelota.com
